jueves, septiembre 21, 2006

...es hora de la matanza...


Si empezamos recién con esto empecemos entonces a terminar con el resto. Empezar a matar es como empezar a terminar, o dicho de otra forma, terminar lo empezado. Jueguitos de palabras que a nadie impresionan pero a muchos aburren… a juicio el juego y se espera el veredicto, esta vez no fueron tortas robadas sino el caldo de cabeza la excusa para afilar la guillotina. Que la afilen bien que más de alguna cabeza rodará, eso si y téngalo Usted claro, seremos prudentes cercenando sólo cabezas de cabelleras ordenadas, sin teñir y peinadas a la vieja usanza. Esto no es un matadero, válganos el santo orden. Tan solo se pretende terminar antes de seguir y tras empezar. Terminemos el juego antes de decapitarlo, no terminarlo sería grosero y falto de decoro. Más vale liquidarlo cuando nadie este con el involucrado, váyanos a pasar que se nos cuele un conocido.

Carguen los fusiles con la pólvora más negra, que la bala tiene cita urgente. Con nuestra sonrisa reflejada en su pulida punta la bala de plata corre rauda a su encuentro con el corazón del condenado. El jurado fue unánime y nos canto en canon el veredicto; Inocente, Ino(Ino)cente(cente), Ino(Ino) cente! ¡Es culpable! ¡Muerte inmediata entonces al inocente! Enciendan su cigarro y véndenle bien los ojos para que escuche con lujo de detalle como su insoportable inocencia muere y de paso se lleve su repulsiva esperanza. Yo por mientras ordeno mis placebos de amargo a dulce para comenzar y terminar con esto.

Juicio a nosotros y nuestra razón; imputados por la verdad única suya, la verdad del respetable.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Parece que hoy tienes de colgar a alguien...

yo también... a mi...


besos mi mongo favorito:....